Numerosas organizaciones hemos solicitado que se respete la fecha original.
La Comisión Organizadora del 28º Encuentro anunció en una conferencia de prensa que decidió cambiar la fecha del mismo de 12, 13 y 14 de octubre al 23, 24 y 25 de noviembre. La decisión fue tomada luego de que el gobernador Gioja manifestara que no puede garantizar las escuelas para el alojamiento de las mujeres que viajamos a participar del encuentro, por motivo de las elecciones que tendrán lugar el día 27 de octubre.
No son una novedad las trabas que año a año los gobiernos provinciales, nacional o la Iglesia intentan poner a la realización de estos encuentros. Pero estos intentos siempre han sido enfrentados. Este año en cambio, la Comisión Organizadora cedió ante la maniobra del gobernador kirchnerista Gioja.
Son claros los motivos del defensor del saqueo minero: a dos semanas de las elecciones lo último que quiere son miles de mujeres marchando por las calles sanjuaninas, discutiendo política, denunciando la violencia, la trata, la megaminería, la explotación, la tercerización y exigiendo, entre otras cosas, el derecho al aborto legal seguro y gratuito.
En una declaración de organizaciones de mujeres, sociales, políticas, estudiantiles y gremiales, encabezada por la CTA nacional, se le pidió a la Comisión Organizadora que revea la decisión, comprometiéndose “a realizar todos los esfuerzos organizativos necesarios para la fecha del 12, 13 y 14 de octubre, si es que el gobernador Gioja decide abiertamente boicotearlo. Denunciaremos en todo el país a Gioja y le impondremos en octubre un Encuentro Nacional de Mujeres multitudinario”. Sin embargo no hubo una respuesta satisfactoria.
Los encuentros nacionales de mujeres son verdaderos hechos políticos, que han permitido a las mujeres fortalecer su organización y avanzar en las luchas para conseguir importantes triunfos. Los últimos dos años incluso han podido coordinarse medidas de lucha de alcance nacional, como el pasado 1º de noviembre donde las mujeres salimos en las principales ciudades a exigir la legalización del derecho al aborto.
Difícilmente decisiones como este cambio contribuyan a garantizar la unidad el movimiento de mujeres y de los encuentros en particular, sino que le dan aire a los que intentan dividir y romper este espacio que tenemos las mujeres.