[VxL! Nº6] Tras una semana de toma de la Casa de Gobierno, los docentes fueguinos conquistaron un aumento salarial del 42%.
El jueves 23 de mayo los docentes agrupados en el SUTEF (Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Fueguina) iniciaron una toma de la Casa de Gobierno de Tierra del Fuego, ubicada en Ushuaia. Desde hace 3 meses y medio está abierto el conflicto salarial en el marco de las paritarias, ya que el Gobierno Provincial de Fabiana Ríos se negaba a aceptar los reclamos de los docentes. Estos exigían un aumento que lleve sus salarios de $4.630 a $6.056, en camino a llegar a $6.836, el 100% de zona sobre el piso nacional. Mientras tanto, los docentes denuncian que los funcionarios cobran $30.000 y que la planta de funcionarios se llevó en dietas en julio 2012 casi 10 millones.
Los docentes habían decidido realizar un paro de 48 horas jueves y viernes de la semana pasada. Pero cuando se movilizaron a la Casa de Gobierno el jueves 23 se encontraron con un fuerte operativo y enfrentaron la represión policial junto a los trabajadores camioneros que se movilizaban en solidaridad. Así se desencadenó la toma de la Gobernación. Los docentes fueron discutiendo y resolviendo cada paso en asamblea. Incluso en la localidad de Río Grande, los trabajadores pasaron por encima de la dirección del SUTEF alineada con Yasky.
Más allá de la conciliación obligatoria dictada por el Gobierno el viernes 24 los docentes y la CTA provincial realizaron un paro de actividades del lunes 27 al miércoles 29, en el marco de la jornada nacional de lucha convocada por la CTA.
El día martes se retomó el diálogo con el Gobierno Provincial en el marco del Consejo Económico y Social de la Provincia, mientras los docentes mantienen la toma y el paro. La última oferta del Gobierno Provincial fue del 42% para el salario del cargo inicial, que lo llevaría a $6.607.
En las últimas horas del jueves 30 los docentes aprobaron la propuesta en asamblea, si bien no quedó garantizado el pago de los días caídos. Luego de la asamblea se procedió a la firma del acta y a constatar las instalaciones de la Casa de Gobierno. Un triunfo rotundo, una lucha histórica.