[VxL! Nº4] Se realizó el Congreso de la Federación
La lista “Por otro 1918” retuvo la Conducción, expresando a las fuerzas combativas e independientes del Gobierno y el Rectorado que conducen 9 de los 13 Centros. Se votó un plan de lucha y el 15 de mayo los estudiantes confluirán con el paro de la CTA.
El 27 de abril se realizó el Congreso de la FUBA. Se acreditaron 72 delegados sobre 130. La lista “Por otro 1918” obtuvo 56 votos. Está integrada por UJS-PO, La Mella-Marea Popular, La Corriente-UBA, Cauce, Izquierda Socialista y MST. Julián Asiner (PO) y Marta Linares (La Mella) fueron electos copresidentes y Echaide (La Corriente) vicepresidente. Esta lista expresa a las conducciones de 9 de los 13 Centros de la UBA (Arquitectura, Ingeniería, Medicina, Psicología, Farmacia, Filosofía, Sociales, Veterinaria y Exactas) que vienen luchando por aumento de presupuesto y contra la CONEAU. Por eso, el resultado es un golpe a las políticas del Gobierno y el Rectorado para la UBA.
Libres del Sur, que hasta el momento era parte del frente de conducción de la FUBA, fue cuestionado fuertemente por distintas fuerzas del frente por su alineamiento electoral en Capital Federal con la UCR de Emiliano Yacobitti (principal dirigente de Franja Morada-Nuevo Espacio) y finalmente decidió no acreditar sus delegados, retirándose del Congreso.
Tampoco participaron del Congreso los delegados de Franja Morada-Nuevo Espacio (UCR), aunque esta vez fracasaron en su intento por dejarlo sin quórum y deslegitimar a la FUBA (como habían hecho el año pasado junto a los K). El MNR (Partido Socialista) no acreditó sus delegados.
La Secretaría General quedó en manos de la lista “Unidos y Organizados” de La Cámpora y aliados, que obtuvo 13 votos. Los K tuvieron que dar quórum esta vez. Seguramente intenten usar esta posición para su juego rupturista de la FUA, por lo que la FUBA deberá redoblar su rechazo a estas maniobras.
El PTS presentó su lista, con 3 votos, obteniendo una secretaría.
Plan de Lucha
El Congreso se dio en el marco de varias luchas estudiantiles como la de Arquitectura contra la CONEAU, la de Ingeniería que logró la eliminación de las Prácticas Profesionales Supervisadas (PPS) y ahora enfrenta el aumento del comedor, y la de varias Facultades contra el chantaje por la validez de los títulos. Arrancó con una marcha al Ministerio de Educación el martes 16 y se realizaron en el transcurso de la semana paneles y comisiones de debate. El sábado 26 se hizo un plenario final.
Se resolvió en primer lugar confluir con el paro de la CTA del 15 de mayo, con clases públicas, cortes de calle y ocupaciones de Facultades, e impulsar una gran marcha educativa para fin de mes. También una campaña por la democratización del cogobierno, rechazando las candidaturas a Rector de Hallú y Barbieri, que expresan el acuerdo K-UCR en el Rectorado.
Se votaron, entre otras mociones, enfrentar el filtro, impulsar la correlatividad por contenido, la desintegración del CBC como ciclo separado de las carreras y su absorción en los primeros años. También, empujar distintas formas de organización de los estudiantes del CBC. A la vez, se acordó un funcionamiento regular de la Junta Representativa y la Ejecutiva, lo que ayudará a evitar la fragmentación y tendencialización de la Federación.
Empuje a la lucha estudiantil
El Congreso fue una reafirmación de la independencia política de la FUBA respecto del Gobierno y de la derecha opositora, rechazó la reforma judicial del kirchnerismo que limita derechos democráticos del pueblo y repudió los acuerdos del Pro y el FPV en la Ciudad para la entrega de tierras públicas al negociado inmobiliario, así como la reciente represión en el Borda. Se destacó el trabajo de la FUBA frente a las inundaciones y se denunció a los responsables de la situación generada. Fue emotivo el homenaje a Mariano Ferreyra y se planteó continuar la lucha por perpetua a Pedraza y contra la tercerización laboral. Además se votaron distintos pronunciamientos sobre la situación latinoamericana y las cuestiones de mujer y género.
El Congreso fue un paso adelante. En primer lugar, sirve de empuje para la lucha estudiantil por todas nuestras reivindicaciones. También, muestra la posibilidad de reagrupar a las fuerzas populares con centro en la lucha de masas y con un programa popular y antiimperialista, para enfrentar la política del gobierno K y de sus rivales en las clases dominantes, acumulando fuerzas para la liberación nacional y social.
"Desde La Corriente de la UBA venimos impulsando la unidad de los 9 Centros y las fuerzas populares, antiimperialistas y de izquierda. Desde las luchas y con un programa popular podemos enfrentar las políticas del Gobierno y avanzar en un camino liberador”
Echaide
Vicepresidente electo de la FUBA