El mismo 24 de marzo el gobierno kircnerista de Formosa reprimió violentamente a comunidades wichí de la localidad de Ingeniero Juárez, que se manifestaban a la vera de la Ruta Nacional 81 pidiendo trabajo, vivienda entre otras reivindicaciones y acompañando las marchas que se realizaban en todo el país. Esa represión fue violenta, con palos, balas de goma y plomo y dejó casi una decena de heridos, incluidos mujeres y el referente de la comunidad Agustín Santillán con 5 impactos de bala. Así recuerda, o mejor dicho homenajea, Gildo Insfran el golpe de estado genocida. Luego de la represión, las comunidades decidieron cortar la ruta 81 en repudio a la misma y por los reclamos que venían sosteniendo. El 26 de marzo a eso de las 19 horas, la el gobierno K de Formosa volvió a reprimir con más saña que la previa. Hubo más heridos, volvieron a golpear a mujeres, niños y a Agustín Santillán, referente de la comunidad. El hermano Reyes Torres recibió un impacto de bala de goma en un ojo. Luego de la represión la comunidad debió levantar el corte.
En repudio a esta represión, el viernes 27 de marzo, representantes
de comunidades de pueblos originarios qom, wichí, pilagá y nivaclé que desde hace
un mes y medio están realizando un acampe en la avenida 9 de julio de la Ciudad
de Buenos Aires, junto a organizaciones sociales y de derechos humanos,
realizaron una conferencia de prensa al mediodía y en la tarde un corte en la
esquina de 9 de julio y avenida de Mayo. Fue importante la presencia de Nora
Cortiñas, de Madres de Paza de Mayo Línea Fundadora, quién repudió la represión
que vienen sufriendo los pueblos originarios. “El 24 (de marzo) mientras
nosotros estábamos en las calles repudiando el terrorismo de Estado, la dictadura
cívico-militar-religiosa y sus consecuencias, estaban reprimiendo en Formosa.
Entonces yo creo que hay que seguir con la movilización popular, hay que seguir
en las calles. Donde hay una injusticia tenemos que estar para que se termine
esa injusticia.”
Luego, el qarasche Félix Díaz denunció muchas de las
injusticias y la represión que sufren los pueblos originarios. “Nosotros
vivimos todos los días mendigando salud, agua, trabajo. Somos los primeros
habitantes de este territorio y hoy estamos siendo manipulados, aislados y nos
asesinan con una política criminal y racista. Insfran tiene mucho odio hacia
los pueblos indígenas. Nosotros estamos siendo expulsados y los pocos
territorios que nos quedan los estamos defendiendo con la vida, no con las
leyes, ponemos el cuerpo. Nos consideran usurpadores, rebeldes, perturbadores
de la paz social y nos aplican la Ley antiterrorista. Los líderes indígenas
tenemos muchas causas civiles y penales.
Seguro que en este momento me van a crear otra causa por estar acá reclamando
por nuestros derechos”. Luego agregó: “Que
tristeza este maltrato que nos hacen los gobiernos. No solamente el gobierno
provincial, también el gobierno nacional tiene la gran responsabilidad de
responder a estos reclamos, estas denuncias que venimos haciendo. Hemos elevado
notas a los tres poderes del Estado, pero ninguno ha contestado, por eso
tomamos esta medida porque no queremos que sigan matando a nuestros hermanos”.