Mientras el presupuesto asignado no alcanza y mantienen a los docentes con paritarias al 17%, saltó un escándalo de corrupción y malversación de fondos dentro del rectorado de la UBA.
A principios de año, como salió en el Vamos! Nº48, tras la insistente denuncia de estudiantes y docentes y como parte de la agudización de la disputa por el control de los servicios de Inteligencia del Estado, tuvo que renunciar el vicerrector de la UBA, Darío Richarte, número dos de la SIDE durante el gobierno de De la Rúa, vinculado al agente Jaime Stiuso y hasta el año pasado abogado de Boudou. Ahora renunció a su cargo de decano de Cs. Económicas, José Luis Giusti: la mano derecha del rector. Fue denunciado por violencia de género y enriquecimiento ilícito, asociado con una de las droguerías que abastecen tanto al Hospital de Clínicas como al Roffo que dependen de la UBA.
A esto se le suma la denuncia por malversación de fondos públicos a otros funcionarios, como el secretario de Hacienda, Emiliano Yacobitti, y hasta al propio rector Alberto Barbieri. Los investigan por haber remodelado un hotel de su propiedad en Santa Teresita, en una obra que realizó el mismo arquitecto que refaccionó las oficinas del rectorado de la UBA. Estas son las autoridades que respaldaron sectores kirchneristas, radicales y del Pro.
Mientras las autoridades se roban la plata de la UBA pretenden que el ajuste lo paguen los estudiantes, docentes y no docentes. Durante las próximas semanas se estarán realizando jornadas de clases públicas, pronunciamientos por cursos y asambleas en las distintas facultades de la UBA para exigir más presupuesto, basta de corrupción y democratización de los órganos de co-gobierno.
Corresponsal