domingo, 14 de febrero de 2016

Convocatoria al encuentro nacional del sindicalismo combativo

Convocado por diversos sindicatos, comisiones internas, delegados y corrientes sindicales, el encuentro se realizará el 5 de marzo. Reproducimos convocatoria.
5 de marzo
Encuentro nacional del sindicalismo combativo y antiburocrático para enfrentar el ajuste

En menos de 60 días, Macri está descargando sobre la espalda de los trabajadores una mega devaluación, tarifazos, despidos, inflación. A través de decretos, la quita de retenciones, la rebaja de impuestos a multinacionales, el aumento de precios y tarifas, son un festín para los empresarios de distintos rubros de la economía. Profundizando el ajuste que empezara el gobierno kirchnerista.
Mientras, los trabajadores vemos que se multiplican los despidos, cae nuestro poder adquisitivo, se encarece el costo de vida. Este gobierno, que entrega millones a empresarios y banqueros, se negó a dar bonos de emergencia a fin de año, aumentos salariales y espera hasta marzo para definir qué hacer con el impuesto a las ganancias de nuestros salarios. Los aumentos de precios, previos inclusive a la devaluación, se sintieron con fuerza especialmente en los productos de primera necesidad.
Las empresas privatizadas de servicios públicos son premiadas con la multiplicación de sus tarifas, a pesar que nos dejan a oscuras cada verano y no han sido castigadas, sino que han recibido subsidios por miles de millones de dólares en los últimos años. Por eso tenemos que pelear por su estatización con gestión de sus trabajadores y usuarios.

Queda claro para quienes gobiernan Macri y Cambiemos

Aprovechando el cambio de gobierno y con el verso de “la herencia recibida”, lejos de no tocar los puestos de trabajo como prometieron en la campaña electoral, han comenzado los despidos masivos de trabajadores estatales que llevan años precarizados y que el kirchnerismo no pasó a planta permanente, con contratos “basura” (¡un tercio de los trabajadores estatales!) o cooperativistas, bajo el verso de “despedir ñoquis”. Es un ajuste nacional que se da en intendencias y provincias gobernadas tanto por Cambiemos como de Schiaretti-De la Sota del Peronismo Renovador y Alicia Kirchner del FpV. Es un primer paso para empujar más despidos y baja salarial hacia el conjunto de la clase trabajadora.
En el movimiento de trabajadores desocupados, estas modalidades son las condiciones de posibilidad del clientelismo, del cual algunos sectores logran salirse organizándose democráticamente y pelean por el pase a planta y por trabajo genuino.
Pero el despido en  el sector estatal es señal de largada para despedir en los privados. Allí está Cresta Roja, el Grupo23 de Szpolski, los obreros de la construcción de Lázaro Báez, los postergados despidos en Siderca y el petróleo, los recientes despidos en la metalúrgica Allevard en Córdoba o la aérea Sol. Se han denunciado 23 mil despidos en el sector privado. Junto con los despidos masivos en el Estado, se están desmantelando los pocos y fragmentarios programas destinados a las mujeres (línea 0800 mujer en Neuquén, programas de asistencia a víctimas de violencia en Córdoba, cierre de refugios en La Plata y tantos otros).
También mencionamos el ejemplo de Donnelley a quien se le negó la expropiación y el juez amenaza con desalojo al fin del período de locación y que el sindicato en vez de apoyar los pretende desconocer.  En medio de la crisis capitalista mundial, con una recesión que anticipa fuertes caídas en la producción automotriz y petrolera, junto a los propios problemas de la estructura productiva local, caen los precios de las materias primas agrícolas. El gobierno, las distintas variantes de los partidos patronales y todos los sectores empresarios buscan que seamos los trabajadores los que paguemos la crisis que ellos provocaron, mediante un rescate a favor del capital. En la industria, los monopolios aprovechan y avanzan con los despidos, así lo podemos ver en petroleros, construcción, cadenas de supermercados, frigoríficos y otros rubros. En la mayoría de esos sectores, los trabajadores se plantaron y enfrentaron los despidos, con organización y lucha en algunas fábricas y dependencias estatales se logró revertir los despidos.
El intento de que los aumentos salariales se negocien por productividad, presentismo o por empresa es una manera más de tratar de poner un techo a las paritarias y licuar nuestros bajos sueldos, a pesar que la enorme mayoría de los trabajadores se encuentra muy por debajo de la canasta familiar, y quienes la superan sufren el impuesto al salario.
La intervención en el INDEC trata de mantener oculta la magnitud del golpe al salario de estos meses decisivos, condicionando las paritarias. Además, la maniobra del Gobierno es pretender imponerle a estatales, docentes y otros, un techo salarial luego de golpear con miles de despidos.
La pelea por el salario, como nos mostraron los aceiteros, nos marca un camino, rechazando los intentos tácitos o explícitos de limitar  las negociaciones. Vamos por la reapertura de paritarias que impongan aumento de salarios indexados, que sea igual a la canasta familiar y la derogación del impuesto sobre los salarios.
Mientras la clase trabajadora y el pueblo se ven afectados por el ajuste, en sus salarios, puestos de trabajo, la salud y educación públicas –cada vez más deterioradas– este Gobierno ya está cerrando acuerdos para un nuevo endeudamiento, para conseguir los dólares que las exportadoras, los pooles de siembra y terratenientes, los industriales y las multinacionales reclaman para continuar con la timba financiera y asegurarse sus súper ganancias.

La salida frente a esta situación es la unidad y la lucha para frenar el ajuste

La lucha contra el ajuste es la que vienen protagonizando miles de compañeros estatales y privados, mientras las conducciones burocráticas de la mayoría de los sindicatos y todas las centrales están borradas, dejando pasar el grueso de los despidos y garantizando la “paz social”. Algunas direcciones sindicales como ATE, empujados por la lucha de su base, llaman a un paro para el próximo 24 de este mes pero sin que sea parte de un plan de lucha a la altura de lo que se necesita para derrotar el ajuste y los despidos. Otros sectores hacen acuerdos políticos con el Gobierno, negociando por la plata de las obras sociales, mientras justifican las medidas por “la herencia recibida”, porque están atados a los proyectos políticos patronales que nos han llevado a esta crisis y que son cómplices del ajuste.
El gobierno ha desplegado una fuerte política represiva para hacer pasar sus planes de ajuste, como vimos en Cresta Roja, La Plata, Río Negro, Neuquén, Santa Cruz, Famatina o el bajo Flores en la CABA. Pero también vemos los avances en el terreno jurídico y político para los fines represivos como el proyecto del “protocolo anti-piquete”, la unificación de la Policía Federal y Metropolitana en la CABA y la plena vigencia de la Ley Antiterrorista del kirchnerismo. Debemos redoblar los esfuerzos para terminar con la criminalización de la protesta social, que desde hace años tiene a miles de luchadores procesados, como los petroleros de Las Heras condenados a perpetua o los trabajadores docentes y camioneros de Tierra del Fuego y los compañeros y compañeras municipales de Cerrillo, Salta, brutalmente reprimidos y presos por luchar contra los despidos. Tampoco podemos permitir ningún tipo de limitación al derecho a huelga. El encarcelamiento de Milagro Sala, en primera instancia bajo la carátula de “instigación a cometer ilícitos y tumultos” por estar acampando en una plaza, es una advertencia a los sectores populares que enfrentan la política de ajuste. Por encima del alineamiento político de esta dirigente kirchnerista, las denuncias sobre sus métodos patoteriles y los hechos de enriquecimiento ilícito, rechazamos la detención y exigimos la libertad de Milagros Sala. Esta actitud del gobernador de Jujuy no sólo queda allí, sino que también ha avanzado en despedir dieciséis estatales utilizando la persecución política.
Por esto el próximo 24 de marzo, al cumplirse los 40 años de la dictadura militar que se llevó la vida de 30 mil compañeros, ganaremos las calles junto al Encuentro, Verdad y Justicia,  para marcar a fuego que la impunidad y el ajuste de ayer no se olvidan y que hoy seguimos enfrentando los avances represivos, la impunidad y el ajuste de todos los gobiernos patronales.
Como clase trabajadora tenemos experiencia y métodos propios, democráticos: la asamblea y las medidas de lucha (paros, movilizaciones, piquetes, ocupaciones, etc.) para luchar y ganar.
La tarea de recuperación de los sindicatos, comisiones internas y cuerpos de delegados en manos de la burocracia sindical es la tarea estratégica de quienes firmamos esta convocatoria. Las tres CGT’s, dirigidas por la burocracia sindical peronista, como la crisis de las CTA, dan cuenta del fracaso del sindicalismo ligado a las variantes políticas patronales.
Por todo esto, creemos fundamental que los luchadores obreros, sindicales, antipatronales y antiburocráticos nos reunamos, discutamos la situación actual, elaboremos puntos programáticos para salir a luchar, coordinemos y demos el apoyo a todos los sectores que están en lucha. Definamos diferentes medidas de acción, coordinación y unidad en los sindicatos donde actuamos, peleando para imponer a las direcciones burocráticas el fin de su política de dejar correr el ajuste.
Con esa perspectiva es que convocamos en forma unitaria desde sindicatos, comisiones internas, cuerpo de delegados, luchadores y agrupaciones  sindicales combativas, antiburocráticas, clasistas, antiimperialistas y de izquierda, a un encuentro nacional del sindicalismo combativo y antiburocrático para el próximo 5 de marzo.
Esta mesa, que expresa esta unidad, considera que ante este ataque al conjunto de la clase trabajadora, se debe dar una pronta respuesta de conjunto. Es indispensable que todos los trabajadores debatan en asambleas cómo afrontar esta situación. Impulsamos en el seno de los sindicatos y centrales que se convoque a medidas de lucha, a un paro nacional activo, con movilizaciones y un plan de lucha que acabe con estas medidas anti obreras del gobierno de Macri, los gobiernos provinciales y las patronales. Nos pronunciamos por la independencia política de la clase obrera.
Llamamos a apoyar cada lucha contra los ataques del gobierno y las patronales. Llamamos a intervenir masivamente, con una política independiente,  el 24 de febrero en el paro y movilización convocado por ATE, que sea parte de una jornada nacional de lucha con movilizaciones y distintas acciones, como primer paso de un plan de lucha para derrotar el ajuste.

Impulsamos la lucha por:

1)    Aumento salarial ya! Reapertura inmediata de todas las paritarias. Salario igual a la canasta familiar (como conquistaron los aceiteros con su huelga del 2015) ¡No a la discusión de salarios por productividad! Paritarios electos por la base. Rechazamos todo tope, como así también la pretensión de incluir Ganancias y Asignaciones Familiares en las paritarias como moneda de cambio. Anulación del Impuesto a las Ganancias en los salarios de los trabajadores. Restitución del salario familiar. 82% móvil para los jubilados.
2)    Ningún despido  ni suspensión. Reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario. Ocupación de fábricas ante los cierres. Estatización bajo gestión obrera.
3)    Apoyamos todas las luchas en curso como la de los trabajadores del Grupo 23, de Cresta Roja y otras en sus piquetes, en sus movilizaciones y en sus huelgas.
4)    Pase a planta permanente de los contratados, no al trabajo en negro y a la precarización laboral. Pase al mejor convenio de los tercerizados. Aumento para los trabajadores de las cooperativas y beneficiarios de planes de empleo nacionales y provinciales.
5)    No al tarifazo.  Apertura de las cuentas de las empresas privatizadas e investigación del destino de los subsidios. Por la estatización de las empresas privatizadas bajo gestión de sus trabajadores y usuarios. No al pago de la deuda externa.
6)    No a la criminalización de la protesta social. ¡No a la limitación del Derecho a Huelga! No a la expulsión por persecución política en los sindicatos. No a la represión, defensa del derecho a la manifestación y la lucha.  Libertad a los presos por luchar, como los municipales de Cerrillo, Salta. Desprocesamiento de todos los compañeros. ¡Absolución de los petroleros de Las Heras, de los trabajadores condenados en Tierra del Fuego y de todos los procesados por luchar!
7)    En defensa de los derechos de las mujeres. Igualdad laboral. Contra la violencia de género. Contra el desmantelamiento de los programas y las trabas al acceso al aborto no punible, por el derecho al aborto, impulsamos la movilización del 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer Trabajadora.
8)   Llamamos a intervenir masivamente, con una política independiente,  el 24 de febrero en el paro y movilización convocado por ATE, que sea parte de una jornada nacional de lucha con movilizaciones y distintas acciones, como primer paso de un plan de lucha para derrotar el ajuste.
9)   ¡Fuera la burocracia sindical! ¡Por una nueva dirección combativa y democrática de la clase trabajadora! Por listas unitarias antiburocráticas en los sindicatos.
10)  El próximo 24 de marzo, ganaremos las calles junto al Encuentro, Verdad y Justicia,  contra  la impunidad y el ajuste de todos los gobiernos patronales.