martes, 20 de mayo de 2014

¡Que vivan los estudiantes!

[Vamos! Nº28]  Chile: Por educación pública, gratuita y de calidad. Más de 100.000 personas colmaron las calles en todo el país. La primera gran movilización estudiantil frente al flamante gobierno de la presidenta Michelle Bachelet.



“Si los medios son de ellos, la calle es nuestra”, decía uno de los carteles en la marcha por educación pública, gratuita y de calidad. Efectivamente, el “jardín de las alegrías”, como bautizó Violeta Parra a los estudiantes, volvieron a colmar las calles de Chile, tanto en Santiago, Valparaíso y otras localidades. Fueron acompañados por docentes, algunos gremios y diputados.
En Santiago la concentración comenzó por la mañana, para marchar por La Alameda, la principal avenida de la capital, hasta llegar al palacio presidencial de La Moneda. Cada lugar tiene su historia. También el reclamo: “Ya va a caer, ya va a caer, la educación de Pinochet”, gritaban miles de estudiantes entre bombos y batucadas. En los carteles podía leerse: “La educación la construye el pueblo, no el gobierno”, “Nuestro proyecto NO es tu reforma”, cuestionando las reformas impulsadas por la presidenta Michelle Bachellet.
Pero lo que también volvió es la represión de los Carabineros, con sus armaduras verdes, palos, escudos y los hidrantes. También con las camionetas blindadas que fumigan gas lacrimógeno a los estudiante s. Fue mientras acababa de comenzar el acto frente al palacio presidencial. Habían sido desplegados 1.800 carabineros. También fueron enfrentados con piedras, palos y bombas molotovs.

La reforma educativa
La masiva movilización estudiantil fue la primera frente al flamante gobierno de Bachelet. Días antes, la presidenta había firmado un nuevo proyecto de ley que busca regular las sanciones a universidades e institutos y que crea la figura de interventor para las instituciones que no puedan asegurar su continuidad. Es la primera medida que promueve el oficialismo, nuevamente en el gobierno desde hace dos meses, que había planteado la reforma educacional como uno de sus pilares electorales.
Resulta que los estudiantes pagan altísimos aranceles y sus familias toman enormes deudas para costear la universidad. Para peor ya se ha dado el caso de la quiebra de la Universidad del Mar, privada, que puso en cuestión la continuidad de la carrera de miles de estudiantes.
Las organizaciones convocantes, la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES), la Confederación de Estudiantes de Chile (CONFECH) y la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (CONES), reclamaron dejar de ser excluidos la reforma educativa que desarrolla el Gobierno. Plantearon que no basta con sumar presupuesto al actual sistema educativo, sino que debe reformularse el sistema educativo para que estudiar pase a ser un derecho social.