Hoy se realizó el acto convocado por la CGT conducida por Hugo Moyano y la Azul y Blanca de Luis Barrionuevo. No fue la continuidad del paro activo masivo del pasado 10 de abril. En cambio, este acto está enmarcado en un camino de desgaste del gobierno kirchnerista pero para acompasar a otros sectores de las clases dominantes, en pugna principalmente dentro el Partido Justicialista de cara al 2015.
Esos sectores, que controlan resortes de poder en la Argentina, acuerdan en lo esencial del ajuste. Las diferencias, en todo caso, no tienen nada que ver con las urgencias populares. ¿Se escuchó a Massa, Scioli, Macri o algún referente del UNEN salir a condenar a los monopolios automotrices por las más de 12 mil suspensiones y despidos en esa industria, después que amasaron y giraron a sus casas matrices fortunas en todos estos años? Nadie dijo nada. Tampoco los afiches convocando al acto, ni en el propio documento leído mencionan nada de esto…
En el paro del 10A se expresaron grandes contingentes del movimiento obrero dispuestos a luchar y en muchos casos desbordaron a sus dirigentes y sindicatos. Hoy se puede ver a los ferroviarios de la línea Sarmiento que llevan adelante una medida como trabajo a reglamento para que se cumpla la pauta salarial. O a los azucareros del ingenio Ledesma en un paro por tiempo indeterminado, o a la histórica lucha de los docentes de Salta y hasta los propios metalúrgicos que le impusieron un paro al propio Caló, entre otros. Desde esta realidad afirmamos que un acto y un documento no es la continuidad del paro del 10 de abril.
Entonces, el acto de Moyano y Barrionuevo obedece a un juego por arriba. Porque los que organizaron este acto, mientras critican al gobierno kirchnerista, acordaron con la ley de indemnización al monopolio imperialista Repsol, como lo votaron los diputados moyanistas junto con el FPV en el Congreso días atrás. O se hacen presentes los que, en la “lucha contra la inseguridad”, proponen la mano dura como Juan Carlos Blumberg, sentado en primera fila.
Los que sí trabajamos para quebrar el ajuste seguiremos impulsando la unidad de los sectores combativos y clasistas del movimiento obrero para lograr el paro activo de 36hs y por un impuestazo a los monopolios, terratenientes y bancos, en camino a la liberación nacional y social. Esto es lo que correspondería luego del 10A y bajo una situación dramática de grandes sectores del movimiento obrero y popular.