miércoles, 3 de septiembre de 2014

Por la estatización de Donnelley con control obrero

[Vamos! Nº35] Quiebra fraudulenta y ocupación de la empresa yanqui. “La quiebra de Donnelley es fraudulenta, tal como ahora lo denuncia el Estado. Exigimos el pago del salario y que se deje sin efecto la quiebra”, dice el comunicado de prensa de la Comisión Interna y trabajadores de Donnelley. En el comunicado también denuncian que “como se revela ahora en las presentaciones que realizó la AFIP, la empresa ha hecho préstamos fraudulentos y ficticios a su casa matriz ubicada en Estados Unidos”. Convocan a una movilización a la sede del Juzgado para el martes 26 (al cierre de esta edición).

Los trabajadores del monopolio yanqui impulsan además la estatización con control obrero de la planta, mientras mantienen ocupada la planta y ya la han puesto a producir. Buscan mantener todos los puestos de trabajo y con las ganancias ponerla al servicio de la comunidad, imprimiendo manuales escolares, libros y revistas académicas accesibles a todos los sectores. 

¿Qué es Donnelley?

Donnelley es un monopolio yanqui que tiene 57 mil empleados y cerca de 600 plantas en 41 países. Es una de las que más factura en el sector, alcanzando los 10 mil millones de dólares en 2013. Además dio a conocer que en el segundo trimestre de este año su facturación en Argentina aumentó un 13%. 

En la planta de Pacheco se imprimen las revistas Para Ti Decoración, Para Ti Deco, Billiken, Vanidades, entre otras publicaciones de la editorial Atlántida. Trabajaban en tres turnos cerca de 400 personas, entre operarios y administrativos. Salvo dos compañeras no hay mujeres. La empresa dejó 800 toneladas de papel sólo de Atlántida, lo que garantiza la continuidad de la producción para algunos meses.

Perspectivas

Ante el cierre de la imprenta, los trabajadores realizaron un corte de la Panamericana ese mismo lunes 11 de agosto. El gobierno dictó la conciliación obligatoria y la propia presidenta atacó a la empresa vinculándola a los fondos buitres. En este contexto los trabajadores vienen sosteniendo la ocupación y producción de la imprenta. El juez designó un síndico, que es rechazado por los trabajadores. 

Los trabajadores ya le han planteado al Ministerio de Trabajo la estatización de la planta. El gobierno rechaza esta posibilidad, a diferencia de como sí hizo con la imprenta Ciccone. El empresario K Szpolski, anuncio que compraría Donnelley. Pero eso tampoco garantiza los puestos y condiciones de trabajo. La asamblea también se ha planteado la cooperativa como una posibilidad.

Todos los días se realizan asambleas, donde debate cómo organizar la producción y también cual es la salida para mantener los puestos de trabajo. El espíritu de lucha está en alto.



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