Entre el 27 y 29 de mayo se realizó en Capital Federal la Cumbre de Pueblos Indígenas, impulsada por la organización de pueblos originarios de Formosa QOPIWINI que está protagonizando un acampe desde febrero en el centro porteño. En la Cumbre participaron autoridades y referentes de 25 pueblos originarios provenientes de 17 provincias de la Argentina.
Durante tres días, más de 90 delegados de las distintas comunidades intercambiaron experiencias, debatieron sobre la situación de los pueblos originarios y elaboraron un documento final donde afirman que “Estamos dispuestos a seguir luchando y afirmando nuestros valores y derechos ancestrales, defendiendo cualquier violación de nuestros pueblos y derechos, y protegiendo a nuestras tierras y territorios”. Estos derechos están consagrados en tratados internacionales y en la propia Constitución Nacional, sin embargo son violados sistemáticamente por el Estado nacional y provinciales.
También se denunciaron las intimidaciones y la represión que sufren por parte del Estado: “En los últimos 10 años, decenas de hermanas y hermanos han sido asesinados por las balas de la policía, los mercenarios y los terratenientes que asaltan nuestros territorios. Más de mil hermanas y hermanos están siendo judicializados por defender sus territorios y la Naturaleza.” En este sentido también reclaman la derogación de la Ley Antiterrorista.
Otro de los puntos principales de discusión fue contra el modelo de producción extractivista, impulsado abiertamente por el Gobierno nacional, que se expresa principalmente en la sojización y la megaminería y provoca el desmonte, la deforestación y la contaminación del agua y la tierra. Con este modelo han avanzado los monopolios y los terratenientes sobre los territorios, siendo el origen del recrudecimiento de la represión, la persecución y el despojo que sufren los pueblos originarios por haberse puesto de pie y luchar por sus derechos.
Por quinceava vez
Luego de la Cumbre, el viernes 30 de mayo se realizó una marcha hacia la Casa de Gobierno con el objetivo de entregarle a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner el documento elaborado. Los pueblos originarios fueron acompañados por distintas organizaciones y por referentes de derechos humanos como el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, el historiador Osvaldo Bayer y las Madres de Plaza de Mayo Nora Cortiñas, Elia Espen y Mirta Baravalle. Los hicieron esperar más de 4 horas y finalmente no fueron recibidos. Ni siquiera les dejaron presentar el documento por mesa de entradas.