Tras el estallido en el Hospital de Clínicas, que dejó varios heridos y evidenció la falta de presupuesto agravada por la corrupción, estudiantes, trabajadores de la Salud y de la UBA, y docentes se convocaron para marchar al Congreso. Al mediodía del miércoles 7, la columna partió desde las puertas del Hospital de Clínicas.
La convocatoria había sido resuelta en multitudinarias asambleas por los estudiantes de la Facultad de Ciencias Médicas UBA. En la marcha también estuvo presente la FUBA, CEADIG, CEFyB, CEFyL. Como no les quedo otra alternativa, también participó Nuevo Espacio que hoy está en la conducción del CECIM.
Mientras se marchaba, una ambulancia del Hospital Garrahan saludaba efusivamente a la columna que cantaba y seguía adelante. Una vez en el Congreso se colgaron las banderas y una delegación entro al palacio para hablar con los diputados y llevar las propuestas votadas en asamblea. Las mismas propuestas al día siguiente iban a ser presentadas también en la Sesión del Consejo Directivo de Ciencias Médicas, pero misteriosamente se “suspendió”.
Ya frente al Congreso, se acercó un diputado del FIT a comentar lo que estaba sucediendo en la sesión de Diputados. Se consiguió una partida presupuestaria extraordinaria de 1.000 millones de pesos pero serían destinados no solo a la UBA sino a las Universidades Nacionales. Con esto salta a la luz que, además de ser escaso, no se sabe quién manejará ese monto ni qué harán los rectores de las universidades. Lo positivo es que se logró hacer que el gobierno con este acto reconozca el ahogo presupuestario que lleva adelante en complicidad con otros partidos de las clases dominantes (y que proyectan profundizar aun más después de octubre).
Se convocó una nueva marcha para el 14 de octubre al Rectorado. Además del pedido de aumento presupuestario, en la última asamblea se votó también la constitución de una junta revisadora de cuentas independiente del gobierno y las autoridades que controle el presupuesto, una comisión de obras a la brevedad, entre otros puntos. Quedó planteado también movilizar al Ministerio de Educación, Ministerio de Salud, de Economía, etc., sabiendo que la UBA –como institución de este Estado– está manejada por corruptos y especuladores que la ponen al servicio de los negocios y no del pueblo.
Corresponsal