El pasado 29 de junio una asamblea del Centro de Cómputos de la Lotería de la Provincia de Buenos Aires resolvió realizar la retención de tareas. El detonante fue una nueva dilación del expediente del nomenclador informático por parte de la Dirección Provincial de la Provincia de Buenos Aires (DPP). Se insistió también con el reclamo de pases a planta.
El expediente del nomenclador de Lotería se inició en el año 2012 y lleva años siendo peloteado por la DPP, con “observaciones” de forma, redacción, etc., que sólo buscan dilatar los tiempos para que el mismo no salga. El nomenclador informático reconoce a cada agente de acuerdo a la función real que lleva adelante en el Centro de Cómputos. Esto implica recategorizaciones, cambios de agrupamiento y mejoras económicas para muchísimos compañeros.
El expediente de pase a plata temporaria de casi 100 contratados y el expediente de pase a planta permanente de 34 compañeros también quedaron frenados en distintas instancias, pese a haber sido impulsados durante la histórica lucha que consiguió la Bonificación de los Premios Prescriptos Poceados durante este año.
Estalla el conflicto
La Asamblea del Centro de Cómputos del 29 de junio se convocó porque el expediente del nomenclador informático había vuelto a ser enviado desde la DPP con anexos observados que ya habían sido aprobados por la misma en anteriores instancias. Una burda maniobra dilatoria. Los delegados de UPCN plantearon esperar a que el secretario del gremio se comunicara con las autoridades der la DPP.
Los delegados de ATE, en cambio, planteamos que si algo habíamos aprendido en la lucha por la Bonificación era que la única herramienta que teníamos los trabajadores para torcerle la voluntad al gobierno de la Provincia eran las medidas de fuerza. Así ganó por unanimidad la moción de realizar una retención de tareas del Centro de Cómputos por tiempo indeterminado por el nomenclador informático y por los expedientes de pase a planta. Entre otras consecuencias, quedó frenado el ingreso de dinero proveniente del juego a la provincia, millones de pesos no ingresan a las arcas provinciales.
Ganamos el pase
a planta permanente
El Gobierno dictó una conciliación voluntaria y se hizo una audiencia en el Ministerio de Trabajo, donde explicitamos los reclamos por los expedientes. Se mantuvo la retención y el día 30 de junio salió el pase a planta de 34 compañeros, 7 de los cuales pertenecen al centro de cómputos.
Conciliación obligatoria
y aprietes
Durante la tarde del 2 de julio, el Gobierno dictó la conciliación obligatoria. Si bien ATE no había sido aún formalmente notificado, durante la mañana del día siguiente los compañeros sufrimos una serie de “aprietes”: el Director de Sistemas recorrió las oficinas amenazando empleado por empleado para que retomen su labor, se le quitó el espacio físico que utilizan los compañeros del Centro de Documentación, y se les cesó el pago de montos en negro que percibían algunos compañeros como compensatorio porque sus funciones no están debidamente reconocidas dentro de la estructura formal del Centro de Cómputos.
Entonces al mediodía se realizó una asamblea, que fue interrumpida por el jefe de Recursos Humanos en compañía de un supuesto funcionario del Ministerio de Trabajo. Esta última persona, sin identificarse, exigió de muy mala manera hablar con “el Cuerpo de Delegados”, sin siquiera indicar delegados de qué gremio (estaban los cuatro gremios presentes en la asamblea). Se le indicó que tenía que retirarse de la asamblea y esperar la finalización de la misma en el caso de que quisiera hablar con alguno de los presentes. Ante esto, el funcionario se retiró de Lotería.
La asamblea definió, frente al cambio de escenario, levantar temporalmente la retención, mantener el estado de asamblea permanente, adherir a la marcha de la CTA Provincial a la Casa de Gobierno el 8 de julio, movilizar todos a la siguiente audiencia en el Ministerio de Trabajo, y ya decretar un paro a partir del día 28 de julio si no salía el nomenclador y el pase a planta temporaria.
Avanza la lucha
El miércoles 15 de julio ya desde temprano los compañeros comenzamos a cortar volantes, armar pancartas, pintar una bandera y comprar cornetas, cohetes, etc. Al mediodía más de cincuenta compañeros pertenecientes a todas las oficinas del Centro de Cómputos recorrimos el hall central de la Lotería, haciendo ruido con cornetas, bombos y redoblantes y tirando panfletos.
Luego movilizamos hasta el Ministerio de Trabajo para la audiencia, y durante las dos horas que duró la misma, hicimos oír en la calle nuestro reclamo. En la reunión, nos enteramos que finalmente el expediente salió de la DPP sin ser observados, cumplimentando un paso más en el camino de que salga el nomenclador. Los delegados de ATE denunciamos las presiones recibidas y conseguimos que se le devuelva la plata a los compañeros y que se restablezca también el espacio físico de reunión del Centro de Documentación. El Ministerio de Trabajo se comprometió a informar en un plazo de 48 horas la identidad del funcionario que había irrumpido en la asamblea de trabajadores.
Los compañeros mantenemos asambleas diarias con el objetivo de seguir paso a paso el avance de los expedientes y poder actuar en el caso de una demora desmedida. A la vez que vamos preparando el paro del 28 de julio si para esa fecha no salieron los expedientes reclamados.
(*) Delegado de ATE en Lotería y miembro de la Agrupación Clasista Treinta de Marzo.