miércoles, 4 de junio de 2014

Dos mil estudiantes y docentes marchamos a Plaza de Mayo

[Vamos! Nº29]  Jornada nacional educativa el 22/5. En reclamo de más presupuesto para la educación, reapertura de paritarias a los docentes, por la derogación de la Ley de Educación Superior, contra la ley que regula la protesta social, entre otras reivindicaciones.



Las federaciones estudiantiles de la UBA (FUBA), La Plata (FULP), Rosario (FUR), San Juan (FUSJ), Patagonia San Juan Bosco (FUP) y Comahue (FUC), y los gremios docentes CONADU Histórica, ADEMyS y Suteba combativos convocamos una jornada nacional de lucha el pasado jueves 22/5, con clases públicas, cortes y marcha a Plaza de Mayo, bajo las consignas: “Plata para educación, no para Repsol”, no al ajuste, aumento presupuestario de emergencia, apoyo a las luchas docentes de todo el país, aumento YA para los docentes universitarios, abajo la LES, la LEN y todas las leyes antieducativas, boleto educativo gratuito para todos los niveles, democratización de la universidad.
La marcha a Plaza de Mayo reunió a 2000 estudiantes y docentes. Fue la expresión de las diferentes luchas que se vienen dando en cada uno de los lugares, con cortes de calle, clases públicas y movilizaciones a las oficinas de las autoridades, con el protagonismo de estudiantes y docentes. Así, en el CBC Montes de Oca conseguimos que designaran docentes que las autoridades pretendían echar cerrando cursos. En la FADU, con clases públicas, aplausazos y pronunciamientos en los talleres, enfrentamos el recorte de presupuesto que imponen las autoridades y damos pelea por la entrega de becas. La semana del 20 al 24 de Mayo, los docentes desde la AGD-FADU realizaron un paro de ad-honorem, ya que son 1800 docentes que no cobran y que sostienen la formación de 30 mil estudiantes en esa Facultad.
En la Universidad hay miles de docentes que no cobran, y no se destina presupuesto suficiente para becas, materiales, equipamientos, etc. A su vez los gremios docentes alineados al kirchnerismo y en acuerdo con las autoridades universitarias arreglaron el año pasado cerrar las paritarias a la baja y por 18 meses, lo que implicó para este año un aumento del 7% hasta julio y se niegan a la reapertura de la negociación.
Para este año se destinó un aumento presupuestario del 11% para educación, cuando la inflación superaría el 40% anual. Mientras siguen garantizando con reservas el pago de la deuda externa, el acuerdo con Repsol y ahora también con el Club de París, no saldan las deudas internas de educación, salud y vivienda. La situación de la educación no escapa del marco de ajuste del Gobierno nacional y el conjunto de las clases dominantes.